lunes, 26 de septiembre de 2011

DESCARTES... HUME...



2) Descartes, Hume, Racionalismo, Empirismo:


René Descartes

La Haye, Francia, 1596 - Estocolmo, Suecia, 1650) Filósofo y matemático francés. René Descartes se educó en el colegio jesuita de La Flèche (1604-1612), donde gozó de un cierto trato de favor en atención a su delicada salud.
Obtuvo el título de bachiller y de licenciado en derecho por la facultad de Poitiers (1616), y a los veintidós años partió hacia los Países Bajos, donde sirvió como soldado en el ejército de Mauricio de Nassau. En 1619 se enroló en las filas del duque de Baviera; el 10 de noviembre, en el curso de tres sueños sucesivos, René Descartes experimentó la famosa «revelación» que lo condujo a la elaboración de su método.
Tras renunciar a la vida militar, Descartes viajó por Alemania y los Países Bajos y regresó a Francia en 1622, para vender sus posesiones y asegurarse así una vida independiente; pasó una temporada en Italia (1623-1625) y se afincó luego en París, donde se relacionó con la mayoría de científicos de la época. En 1628 decidió instalarse en los Países Bajos lugar que consideró más favorable para cumplir los objetivos filosóficos y científicos que se había fijado, y residió allí hasta 1649.
Los cinco primeros años los dedicó principalmente a elaborar su propio sistema del mundo y su concepción del hombre y del cuerpo humano, que estaba a punto de completar en 1633 cuando, al tener noticia de la condena de Galileo, renunció a la publicación de su obra, que tendría lugar póstumamente.
En 1637 apareció su famoso Discurso del método, presentado como prólogo a tres ensayos científicos. Descartes proponía una duda metódica, que sometiese a juicio todos los conocimientos de la época, aunque, a diferencia de los escépticos, la suya era una duda orientada a la búsqueda de principios últimos sobre los cuales cimentar sólidamente el saber.
Este principio lo halló en la existencia de la propia conciencia que duda, en su famosa formulación «pienso, luego existo». Sobre la base de esta primera evidencia, pudo desandar en parte el camino de su escepticismo, hallando en Dios el garante último de la verdad de las evidencias de la razón, que se manifiestan como ideas «claras y distintas».
El método cartesiano, que Descartes propuso para todas las ciencias y disciplinas, consiste en descomponer los problemas complejos en partes progresivamente más sencillas hasta hallar sus elementos básicos, las ideas simples, que se presentan a la razón de un modo evidente, y proceder a  partir de ellas, por síntesis, a reconstruir todo el complejo, exigiendo a cada nueva relación establecida entre ideas simples la misma evidencia de éstas.
Los ensayos científicos que seguían, ofrecían un compendio de sus teorías físicas, entre las que destaca su formulación de la ley de inercia y una especificación de su método para las matemáticas. Los fundamentos de su física mecanicista, que hacía de la extensión la principal propiedad de los cuerpos materiales, los situó en la metafísica que expuso en 1641, donde enunció así mismo su demostración de la existencia y la perfección de Dios y de la inmortalidad del alma. El mecanicismo radical de las teorías físicas de Descartes, sin embargo, determinó que fuesen superadas más adelante.
Pronto su filosofía empezó a ser conocida y comenzó a hacerse famoso, lo cual le acarreó amenazas de persecución religiosa por parte de algunas autoridades académicas y eclesiásticas, tanto en los Países Bajos como en Francia. En 1649 aceptó la invitación de la reina Cristina de Suecia y se desplazó a Estocolmo, donde murió cinco meses después de su llegada a consecuencia de una neumonía.
Descartes es considerado como el iniciador de la filosofía racionalista moderna por su planteamiento y resolución del problema de hallar un fundamento del conocimiento que garantice la certeza de éste, y como el filósofo que supone el punto de ruptura definitivo con la escolástica.

OBRAS

Aunque se conservan algunos apuntes de su juventud, su primera obra fue Reglas para la dirección del espíritu creada en 1628 y publicada póstumamente en 1701. Luego escribió La luz o Tratado del mundo y El hombre, que retiró de la imprenta al enterarse de la condena de la Inquisición a Galileo en 1633, y que más tarde se publicaron a instancias de Gottfried Leibniz. En 1637 publicó el Discurso del método para dirigir bien la razón y hallar la verdad en las ciencias, seguido de tres ensayos científicos: Dióptrica, La Geometría y Los meteoros. Con estas obras, escritas en francés, Descartes acaba por presentarse ante el mundo erudito, aunque inicialmente intentó conservar el anonimato.
En 1641 publicó las Meditaciones metafísicas, acompañadas de un conjunto de Objeciones y respuestas que amplió y volvió a publicar en 1642. Hacia 1642 puede fecharse también el diálogo, obra póstuma, La búsqueda de la verdad mediante la razón natural.
En 1644 aparecen los Principios de filosofía, que Descartes idealmente habría destinado a la enseñanza. En 1648 Descartes le concede una entrevista a Frans Burman, un joven estudiante de teología, quien le hace interesantes preguntas sobre sus textos filosóficos. Burman registra detalladamente las respuestas de Descartes, y éstas usualmente se consideran genuinas. En 1649 publica un último tratado, Las pasiones del alma, sin embargo aún pudo diseñar para Cristina de Suecia el reglamento de una sociedad científica, cuyo único artículo es que el turno de la palabra corresponda rotativamente a cada uno de los miembros, en un orden arbitrario y fijo.
De Descartes también se conserva una copiosa correspondencia, que en gran parte canalizaba a través de su amigo Mersenne, así como algunos esbozos y opúsculos que dejó inéditos. La edición de referencia de sus obras es la que prepararon Charles Adam y Paul Tannery a fines del siglo XIX e inicios del XX, y a la que los comentaristas usualmente se refieren como AT, por las iniciales de los apellidos de estos investigadores.






David Hume
Filósofo inglés. Nació en el seno de una familia emparentada con la aristocracia, aunque de modesta fortuna. Estudió durante un tiempo leyes en la Universidad de Edimburgo por voluntad de su familia, pero su falta de interés determinó que abandonara la carrera y se viese obligado a buscar la manera de ganarse la vida.
Tras una breve tentativa de iniciarse en el comercio, decidió dedicarse al estudio. En 1734 marchó a Francia, donde pasó tres años, la mayor parte de ellos en La Flèche, dedicado a la redacción de su primera obra, Tratado de la naturaleza humana, que completó tras su regreso a Londres y se empezó a publicar en 1739. El tratado no despertó ningún interés, y Hume se retiró a la casa familiar en Ninewells.
La favorable acogida que obtuvo la publicación en Edimburgo de la primera parte de sus Ensayos morales y políticos en 1742, le hizo olvidar su primer fracaso. Trabajó como preceptor del marqués de Annandale (1745-1746) y luego como secretario del general St. Clair (1746-1748), a quien acompañó en misión diplomática a Viena y Turín. Nombrado bibliotecario del Colegio de Abogados de Edimburgo, emprendió la redacción de una historia de Inglaterra, que publicó desde 1754 hasta 1762 en varias entregas, algunas bastante mal recibidas por la burguesía liberal.
En 1763 aceptó la invitación de lord Hertford de incorporarse a la embajada en París, ciudad donde residió hasta 1766 y en la que se relacionó con los enciclopedistas. En 1769 regresó definitivamente a Edimburgo con el propósito de disfrutar de la fortuna que le habían proporcionado tanto sus cargos como, finalmente, sus obras.
Se ha considerado a Hume como uno de los máximos representantes del llamado empirismo inglés; su análisis crítico del conocimiento, que ejerció sobre Kant una decisiva y reconocida influencia, insistió en la importancia de investigar el origen de las ideas, que él entendía como copias o imágenes de las impresiones (sensaciones, pasiones, emociones). Concibió el razonamiento como la actividad de descubrir relaciones entre ideas, que podían ser de dos tipos: las existentes entre hechos (objeto del razonamiento probable, fundado en la experiencia) y relaciones entre ideas (objeto del razonamiento demostrativo, basado en el principio de no contradicción).
Estimando imposible cualquier otra forma de razonamiento, lo que suponía rechazar como falsas las proposiciones de la metafísica o la teología, sometió a crítica toda clase de ideas, y refutó en especial las de sustancia, existencia y relación causal. Respecto de esta última, sin negar la posibilidad de que exista una causalidad real, afirmó que era imposible conocerla: el origen de la idea de causa hay que buscarlo, por tanto, en el hábito psicológico de percibir determinadas sensaciones de forma simultánea o sucesiva, sin que dicha idea encierre ninguna necesidad lógica o racional.

Obras.

  •       Historia amable de mi vida (1734)
  •       Tratado sobre la naturaleza humana.
  •       Libro 1: "Del entendimiento" Tratado que comprende desde el origen de las ideas a su división.
  •       Libro 2: "De las pasiones" Tratado de las emociones.
  •       Libro 3: "De la moral" Ideas morales, justicia, obligaciones, benevolencia.
  •       Resumen de un libro recientemente publicado: Titulado Tratado sobre la naturaleza humana (1740)
  •       Ensayos sobre moral y política (primera edición: 1741–1742)
  •       Cartas de un caballero a su amigo de Edimburgo: Edimburgo (1745).
  •       Investigación sobre el entendimiento humano (1748)
  •       Investigación sobre los principios de la moral (1751)
  •       Discursos políticos Edimburgo (1752).
  •       Cuatro disertaciones: Historia natural de la religión. De las pasiones. De la tragedia. Del criterio del gusto  Historia de Inglaterra (1754–1762)
  •       Historia natural de la religión (1757)
  •       Mi vida (1776)
  •  
  •       Diálogos sobre la religión natural (1779)


El problema de la causalidad
Cuando un acontecimiento sucede tras otro, la mayoría de la gente piensa que una conexión entre ambos acontecimientos hace que el segundo suceda al primero. Hume desafió a esta creencia en su primer libro Tratado de la naturaleza humana y más tarde en su Investigación sobre el entendimiento humano. Se dio cuenta de que aunque percibimos que un elemento suceda al otro, no percibimos ninguna condición necesaria y suficiente entre los dos. Y, de acuerdo con su epistemologia escéptica, sólo podemos confiar en el conocimiento que adquirimos a través de nuestras percepciones. Hume declaró que nuestra idea de causalidad consiste en poco más que la esperanza de que ciertos acontecimientos se den tras otros que los preceden. «No tenemos otra noción de causa y efecto, excepto que ciertos objetos siempre han coincidido, y que en sus apariciones pasadas se han mostrado inseparables. No podemos penetrar en la razón de la conjunción. Sólo observamos la cosa en sí misma, y siempre se da que la constante conjunción de los objetos adquiere la unión en la imaginación». En realidad no podemos decir que un acontecimiento causó al otro. Todo lo que sabemos con seguridad es que un acontecimiento está correlacionado con el otro. Para describir esto, acuñó el término conjunción constante, que consiste en que cuando vemos cómo un acontecimiento siempre causa otro lo que en realidad estamos viendo es que un acontecimiento ha estado siempre en conjunción constante con el otro (costumbre). En consecuencia, no tenemos ninguna razón para creer que el primero causó al segundo, o que continuarán apareciendo siempre en conjunción constante en el futuro. La razón por la que presentamos este comportamiento no es que la causa-efecto sea el comportamiento de la naturaleza, sino los hábitos de la psicología humana.






Ideas e impresiones


Hume cree que todo el conocimiento humano proviene de los sentidos. Nuestras percepciones, como él las llamaba, pueden dividirse en dos categorías: ideas e impresiones. Así define estos términos en Investigación sobre el entendimiento humano: «Con el término impresión me refiero a nuestras más vívidas impresiones, cuando oímos, o vemos, o sentimos, o amamos, u odiamos, o deseamos. Y las impresiones se distinguen de las ideas, que son impresiones menos vívidas de las que somos conscientes cuando reflexionamos sobre alguna de las sensaciones anteriormente mencionadas». Más adelante precisa el concepto de las ideas, al decir «Una proposición que no parece admitir muchas disputas es que todas nuestras ideas no son nada excepto copias de nuestras impresiones, o, en otras palabras, que nos resulta imposible pensar en nada que no hayamos sentido con anterioridad, mediante nuestros sentidos externos o internos». Esto constituye un aspecto importante del escepticismo de Hume, en cuanto equivale a decir que no podemos tener la certeza de que una cosa, como Dios, el alma o el yo, exista a menos que podamos señalar la impresión de la cual, esa idea, se deriva.


lunes, 19 de septiembre de 2011

EL PROBLEMA DEL CONOCIMIENTO...


3) Conocimiento Critico o interrogantes de la  filosofía:



  • ¿Como se produce el conocimiento?

El  conocimiento se genera a través de procesos de aprendizaje, siendo éste, un mecanismo individualizado que depende de la capacidad de cada persona y de sus experiencias pasadas, 
pudiendo definirse aprendizaje individual, como el  proceso de adquisición y almacenamiento del "conocimiento" que tiene por objeto incrementar la capacidad del individuo para realizar acciones 
efectivas. 
  • ¿Que significa que alguien conozca algo?
Significa una correlación entre el sujeto y el objeto, que entran en contacto mutuo. El sujeto aprehende el objeto.
El conocer muchas veces nos deslumbra, nos sorprende, nos deja maravillados ante algo que no sabíamos que existía, pero luego de ese estadio naturalizamos lo conocido, pasa a ser algo existente, algo mas de lo "ya conocido". Durante toda nuestra vida aprendemos, en todo momento, de las experiencias, de lo que nos enseñan, de lo que escuchamos, de lo que vemos...
  • ¿Cuales son los instrumentos del conocimiento?
En todo conocimiento se hallan frente a frente un sujeto y un objeto.
Todo conocimiento ha de ser un sujeto sobre un objeto, la relación existente entre ambos es el conocimiento mismo.
  • ¿Como puedo transmitir el contenido de mi conocimiento sin traicionar su versión original?
El conocimiento debe ser transmitido respondiendo a su versión original, sin modificarlo ni cambiarlo, mas allá de que no estemos de acuerdo en algunos aspectos que plantea.
  • ¿Hay determinados objetos o cuestiones que se resisten a ser conocidos?
Siempre hay cosas nuevas por conocer, siempre hay sujetos, objetos, cuestiones, que se resisten a ser conocidas o que no pueden ser conocidas porque llegar a esa verdad podría desestructurar un sistema...
  • ¿Y si todo lo que consideramos nuestro conocimiento y nuestra realidad fuera un simple sueño, una creación de nuestra fantasía?
A algunas personas les cambiaría por completo la existencia, a otras les rompería las estructuras de vida que tienen, a otras como nosotras muchas veces nos paso que desearíamos que la realidad que estamos viviendo fuese un sueño, una fantasía. 
Es difícil a veces comprender algunas cuestiones y en muchas oportunidades nos preguntamos si es real lo que estamos viviendo..
  • ¿Que diferencia hay entre el conocimiento cotidiano, el científico, el místico y el filosófico?¿Cual de ellos nos muestra la profundidad de los seres con mayor fidelidad? 

  • El conocimiento cotidiano lo adquirimos por nuestra propia experiencia o por lo que nos transmiten otras personas. Este conocimiento se adquiere de forma espontanea, es un saber impreciso, desordenado. Lo adquirimos a medida que crecemos.
  • El conocimiento científico es una aproximación crítica a la realidad apoyándose en el metodo científico que fundamentalmente, trata de percibir y explicar desde lo esencial hasta lo más prosaico, el porqué de las cosas y su devenir, o al menos tiende a este fin
  • El conocimiento religioso es un saber que se acepta por la fe, no es racional y no admite criticas.
  • El conocimiento filosofico, es un saber sin supuestos, su objetivo es tratar de llegar a los fundamentos mas allá de los fenómenos. Formula siempre los mismos problemas con respuestas nuevas. Es inquieto, no reposa en ninguna respuesta definitiva.


Al referirnos a, quien nos muestra la profundidad de los seres con mayor fidelidad, estamos tratando un tema que puede tener diferentes puntos de vista, de acuerdo a cual es la forma de vida, la creencias, el conocimiento de cada persona.  Cada quien tiene derecho a creer en lo citidiano, lo cientifico, lo religioso o filosofico...